Ayer
viernes encontramos una nueva sorpresa en el cofre de los bandidos.
Pero antes mirad qué bandidos han aparecido al lado de las puertas de la
clase de la seño Charo y de la nuestra. Nos están vigilando y cuidando.
Pues
bien, cuando llegamos el viernes por la tarde a clase, nuevamente, el
cofre de los bandidos estaba en el suelo, al abrirlo la seño se encontró
con otro cofre, pero éste era más pequeño y de madera. Así que la seño
lo saco y vió que pesaba un poco, lo agitó y sonaba, ¡¡estaba lleno!!
Por eso lo abrió y nos encontramos con que estaba lleno de monedas de
chocolate y collares de chuche.
Estabamos
muy emocionados, todos nos lo queríamos llevar a clase, pero... somos
dos clases diferentes... ¿qué podíamos hacer? Así que, tras pensar un
poco, decidimos repartirlo entre todos, como no podíamos esperar más,
bajamos al patio, nos sentamos en círculo y las seños repartieron las
monedas entre todos, y los collares se los dieron a tres niños que no
pueden comer chocolate.
Una vez repartido todo, nos dispusimos a comernos las monedas o collares. Qué bueno estaba todo.
Cuando acabamos subimos a clase, pues nos estaban esperando nuestros disfraces de bandidos.
¡Qué chulos los disfraces! Estáis haciendo un proyecto muy completo, los niños se lo deben de pasar genial en clase. :) Un saludo.
ResponderEliminarEl cuento está dando mucho de sí y los peques se lo están pasando genial. Un abrazo
EliminarCuidado! Tu clase está llena de bandidos, jeje. Se ve que les ha gustado el cuento. Un saludo
ResponderEliminarjajaja, sí, les ha gustado muchísimo. Un saludo
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